El típico nombre de banda que llevamos escuchando toda la vida pero que no sabemos realmente donde colocar. Para eso está el Azkena Rock Festival, para rescatarnos de nuestra ignorancia y darnos la oportunidad de ver en directo aquello que hasta el momento apenas nos habíamos parado a apreciar. Dubrovniks son australianos y claro, eso pesa. Hay influencias del sonido clásico de las antípodas: rock potente con melodía latente. Power pop guitarrero tangente a lo que se ha hecho en Inglaterra o EEUU a lo largo de la historia. Eso sí, Dubrovniks tenían, tienen, algo que los hace especiales. Y es que si la generación que creció con Motley Crue y Guns N' Roses los hubiese escuchado en los primeros noventa los hubiese abrazado sin ningún tipo de miramiento.
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