HIGHLIGHTS. Highpower! - pagina 2





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Miguel Moral: Bajo y voz
Mario Coira: Guitarra y voz
Xabi Valero: Guitarra
Sergio García: Batería


PROXIMOS CONCIERTOS:
Viernes 23 de enero. Elorrioko Gaztetxea.














Quien vivió eso tuvo que disfrutarlo.
Ya te digo. Aunque nosotros, exceptuando a Miguel, hemos renegado muchísimo de esa época. Teníamos un profesor que era muy tajante a la par que gracioso y basto cuando se refería a esos grupos como el puto grunge. Pero cuando estábamos sin bajista empezamos a darle al acústico de Alice In Chains. Luego "Facelift" y "Ten".
Miguel: ¡Todavía no les gusta Nirvana!
Nirvana no. De hecho ayer nos pusieron "In Utero" en el coche y pensamos que vaya brasa. Pero bueno, ya llegará. Tenemos una puertecita que se va abriendo y todo llegará. Aunque ese disco en concreto lo vemos complicado.  

En 1991 renegar del grunge era algo normal. Muchos lo miramos con desconfianza. Se supone que se cargaban la escena hard rockera esto y lo otro. Pero la tontería duró poco. Afortunadamente.
Veías el pantalón corto y las botas y decías que no.

Durante unos dos años.
Miguel: En los barrios éramos así. Eramos heavies. Yo estaba en Shisha Pangma y mis compañeros me decían que esas bandas eran de pijos. Que estaba desafinado. Y al final todo les entró. 

¿Os sentís cómodos con las etiquetas?
Hay un momento en el que parece excesivo. Nosotros no lo tenemos claro. Vemos que hacemos diferentes cosas aunque todas pueden ir en una misma dirección. Hacemos rock. Rock duro. Pero rock.

Hemos hablado de "Blixie Tombs" y "F.A.S.O.S." que ya estaban en la demo. ¿Cuál es la historia de los otros cuatro temas?
"Climbing the Hill" la compusimos y grabamos en estudios Luberri un año antes de entrar Miguel. "Silver Queen" y "Last Sunset" eran temas que tenía escritos Miguel. Y "Out of Mind" la teníamos de antes pero no tenía bajo y fue lo primero que compuso con nosotros.

¿Cómo es trabajar con Xanpe?
Es surrealista lo gracioso que puede llegar a ser pero es cierto que todo lo que te transmite acaba plasmado en el resultado final. Con una tranquilidad tensa ya que lo grabamos todo en diez días. Pero la tranquilidad es la clave. En cuanto le conoces te hace sentir cómodo y es capaz de convertir cualquier cosa en algo fácil. Es receptivo y comprensivo. Te escucha y te ayuda en lo que puede. Y es muy profesional.

¿Qué esperáis de este EP?
Que se mueva y que la gente lo empiece a conocer. Que nos dé a conocer aquí y si se puede fuera también. Alcanzar un radio mayor de lo que alcanzamos ahora. Si nos podemos ir una semana por Europa a tocar porque cuadra y es viable sería perfecto. Se trata de enseñar la nueva cara de la banda

¿Os queda el peso de no sacar un disco grande?
Un poco sí pero siempre decimos lo mismo. Que en nada podemos tener otro trabajo con cosas nuevas. Lo que ocurre es que con "Storming the Gates" sentíamos la necesidad de publicar algo, de activarnos. Pero tampoco queríamos obligarnos a cerrar temas nuevos. Nos podíamos arreglar con los que teníamos y así lo hemos hecho. No queríamos correr y forzarnos. Las prisas nunca ayudan.

Aunque es pronto todavía ya que estamos hablando de un EP que tiene pocas semanas de vida. ¿Teneis una idea de cuándo podría llegar un LP completo?
Cuándo no lo sabemos porque como hemos dicho no queremos correr ni tener prisa. Pero sí que hemos pensado que igual en unos meses hay que volver a grabar algo.





Villa de Bilbao. ¿Cómo fue la experiencia?
Cojonuda. Fue incluso agotador porque necesitábamos que pasase para centrarnos en otras cosas. Fue todo muy intenso por muchas razones. Para nosotros el Villa siempre había sido algo que habíamos visto ahí arriba. Presentábamos maquetas y no nos cogían y de repente, un año nos cogen y casi ganamos. Teníamos a Quaoar como referencia. Los conocemos y hemos ido al colegio con ellos. Para nosotros eran nuestros amigos pero también nuestros hermanos mayores en esto de la música. Ganaron. Vernos nosotros dentro, no ya llegando a la final sino participando, era algo muy grande.

¿Te sientes más visible de cara a todo el mundo?
Sí. En los medios. O caminando por Bilbao o por el metro y ver un cartelón grande con nuestro nombre. Te hace ilusión. De hecho creemos que todavía no hemos asimilado del todo todo lo que pasó. Es importante también que te graben porque puedes verte en unas condiciones muy buenas y eso es positivo.

¿Sirve para sentiros un grupo?
Sí. Te pone en el mapa de Bilbao y, encima, nos pone en el Azkena Rock Festival. Es una experiencia satisfactoria porque conlleva cierto reconocimiento y cuando trabajas duro es agradable.

¿Pesó mucho ser segundos?
No, para nada. Y encima con el premio del Azkena casi que en el fondo nos sentimos ganadores. En la semifinal pensábamos que había que currárselo para llegar a la final y ya una vez en la final pensábamos que cualquiera de los tres podía ganar. No creemos que nadie haya salido perdiendo.

Pero, ¿En el momento?
Hombre. Veíamos que nos llevábamos los premios. Que si mejor guitarrista, mejor bajista... hay un momento en el que lo ves cerca. Pero bueno, seguimos pensando que todavía no somos conscientes de que quedamos segundos en el Villa de Bilbao. El mismo día de la final subimos arriba a firmar unos papeles y estaban todos los carteles. Y flipamos viendo nombres. Su Ta Gar, PI.L.T...  

Y en verano a Mendizabala.
El Azkena Rock Festival es nuestro festival. Hemos ido a muchos y es un premio muy bonito y especial para nosotros.

Fotos (portada y artículo): www.denaflows.com


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